top of page

noticias

 

 

17 de julio 2013. Festival Internacional de teatro Clásico de Almagro. Almagro Off.

 

El pasado 17 de julio Germanía de Teatro participó en el III Certamen Almagro Off con La espñaola inglesa de Cervantes en el Teatro La Veleta. Esta es la crítica que apareción en el periódico Lanza de Almagro:

 

LANZA. Almagro 19 de julio2013

Julia Yébenes

 

GERMANÍA VISUALIZA CON SU PRÊT-A-PORTER CLÁSICO UNA NOVELA EJEMPLAR CERVANTINA.

 

  Como suele pasar con las subtramas de los melodramas, el certamen off del Festival de Almagro es un valor añadido a las producciones que se seleccionan en el ciclo encajero. Es una mirada a los clásicos con otro aire, con un enfoque agudo y una puesta en escena moderna.

  “La española inglesa”, uno de los espectáculos que acogió “La Veleta” el miércoles, pone de manifiesto la suma de estos elementos con un resultado airoso.

  Como dice la producción de Germanía de Teatro, “asistimos a una gran aventura con grandes dosis biográficas del propio Cervantes, evocaciones imaginarias del autor sobre Inglaterra y su mundo”. Se trata de un montaje arriesgado, tanto por el recurrente argumento del triunfo del amor como por por los escenarios donde se ubica la novela ejemplar cervantina.

  Por ello, Miguel Cubero ha sabido introducir unos códigos de interpretación actorales y visuales que enseguida se hacen cómplices del espectador, mientras que María Ayuso (también intérprete) ha sacado un argumentario claro que, en momentos, precisa de narraciones sobre los hechos que se produjeron y escribieron entre católicos y protestantes en el siglo XVI.

  Lo moderno de la pieza es el rapto de una niña española por un noble inglés cuando la flota guerreaba en Cádiz. Después, la hermosura de Isabel es la que que triunfa allende los mares, incluso delante de la propia Reina Isabel y es ya lo que dice el propio Cervantes: “esta novela nos podría enseñar cuánto puede la virtud, y cuánto la hermosura, pues son bastantes juntas, y cada una de por sí, a enamorar aun hasta los mismos enemigos; y de cómo sabe el cielo sacar de las mayores adversidades nuestras, nuestros mayores provechos”

  El montaje tenía una perfecta ambientación musical con las composiciones de corte clásico en directo de Sara Águeda (arpa) y Teresa García (clave), además de las interpretaciones de los actores que cantan como solistas o en coro dependiendo del momento melodramático.

Talento

  El enamorado Ricaredo (Sergio Mariottini) desprende talento, al igual que la mayoría del elenco, Camila Viyuela como Isabel, María Ayuso como Catalina, Juanma Rodríguez como Arnesto, Ione Irazabal como reina o Álvaro Martinez como Clotaldo.

Pero lo más llamativo y novedoso es el vestuario, con una estética atractiva tras un pensado reciclado, con emblemas británicos (burberry) y otras piezas de papel o cartón (gorros, gorgueras y adornos) de la mejor técnica del patchwork. Como si fuera un prêt-a-porter de hace cuatro siglos, los trajes de este montaje son prácticos y muy vistosos, tanto que parecen auténticas ropas de tejidos tupidos, lujosos, terciopelos, brocados y damasco. Cotas y vestidos de cintura alta parecían salidos del mejor taller madrileño o sevillano de la época, incluso.

  El espacio escénico se quedó muy constreñido por la propia sala pero con unas enseñas visuales (gallardetes, divisas, escudos...) que ambientaban las innumerables escenas de la obra en la corte inglesa, en el mar, en Cádiz... El propio escenario fue una plataforma de madera tumbada que al empezar y terminar la función sirvió de cuarta pared y que fue la base de un navío. Y los propios actores se vistieron y se desvistieron al fondo del escenario y l ojo del espectador. En definitiva fue una apuesta por un texto novedoso que representa unos valores tradicionales y en el que, como buena película de Hollywood, triunfa el amor verdadaero.

bottom of page